En el marco de la operación «Finoplast», la Guardia Civil española ha desmantelado una red criminal dedicada a la importación, almacenamiento, transporte y exportación ilegal de residuos plásticos hacia varios países, incluido Marruecos. En esta operación, cinco personas han sido detenidas y otras 15 están siendo investigadas por su participación en el tráfico ilícito de más de 41.000 toneladas de residuos plásticos, tanto a nivel nacional como internacional. La operación se inició tras el hallazgo, a finales de 2022, de un vertedero ilegal con miles de toneladas de residuos plásticos en una fábrica de ladrillos abandonada en la región de Bierzo, cerca de León. Las instalaciones no contaban con las autorizaciones ambientales necesarias. La investigación reveló que la mayoría de los residuos procedían de la importación de plásticos agrícolas. Estos materiales eran transportados en camiones y almacenados en lugares no autorizados en León y Valencia. Según los documentos revisados, más de 18.800 toneladas de estos residuos fueron trasladadas ilegalmente desde Francia y Portugal hacia España. Además, aproximadamente 22.785 toneladas de residuos plásticos fueron exportadas de contrabando a países como Marruecos, India, Turquía, Vietnam, Malasia, Tailandia, Hong Kong, Pakistán, Reino Unido, Angola, Brasil y los Emiratos Árabes Unidos. Para ocultar estos residuos en contenedores, se utilizaron documentos falsificados. La investigación también descubrió que las empresas implicadas escondían los residuos detrás de fardos de plástico limpio, lo que complicaba su detección durante las inspecciones aduaneras y policiales. Los equipos de la Guardia Civil registraron las instalaciones de cuatro empresas y la sede de otras 16, además de realizar redadas en dos domicilios donde se incautaron documentos. También se confiscaron importantes cantidades de residuos almacenados ilegalmente, en colaboración con las autoridades ambientales de Castilla y León y Valencia.