Marruecos ha conseguido un nuevo triunfo diplomático en la UNESCO. Este miércoles, en la vigésima sesión del Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, celebrada en Nueva Delhi, la organización ha inscrito oficialmente el caftán en la lista del patrimonio inmaterial, reconociéndolo a nombre de Marruecos. La sesión matutina estuvo marcada por un intento de la delegación argelina de introducir una enmienda para clasificar el caftán como patrimonio «compartido» con otras naciones. La propuesta fue rechazada de inmediato por la delegación marroquí. Rabat respondió recordando, con diplomacia, que aunque el caftán está «extendido» en varios países, su origen, evolución estilística e identidad cultural son innegablemente marroquíes. La maniobra argelina fue además desautorizada por varios países aliados de Marruecos, entre ellos los Emiratos Árabes Unidos, Paraguay y Burkina Faso, que respaldaron la posición marroquí. En su discurso tras la adopción de la decisión final, el embajador Samir Dhar, representante permanente de Marruecos ante la UNESCO, condenó la «instrumentalización política» del expediente del caftán por parte de «un Estado miembro con fines políticos». Este episodio sigue a un primer intento de Argelia, el lunes, de modificar el orden del día para incluir una enmienda relacionada con una prenda tradicional ya en competencia, buscando integrar el «Uso del caftán». Aislada y consciente de que una votación resultaría en un nuevo revés, Argel finalmente retiró su propuesta para evitar una segunda derrota tras la sufrida el 7 de noviembre en la elección de los miembros del Consejo Ejecutivo de la UNESCO. En esa ocasión, la candidatura argelina fue rechazada, mientras que Marruecos fue elegido con éxito, obteniendo 146 votos, junto con Jordania (131) y Egipto (114).