Las autoridades de Níger han manifestado su firme rechazo a las expulsiones de migrantes que Argelia lleva a cabo hacia su territorio. El general Mohamed Toumba, ministro del Interior de Níger, expresó su indignación durante un encuentro con el director de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Según él, estos retornos «contravienen los principios de buena cooperación y los tratados internacionales. Estos actos son lamentables e inaceptables». La Radio Nigerina ha destacado que «Niamey denuncia estas operaciones de repatriación» que se realizan sin previo aviso al gobierno de transición de Níger. Según la misma fuente, se ha observado «un aumento» en el número de migrantes devueltos por Argelia a las fronteras nigerinas. «En abril, 4,000 personas fueron rechazadas, llegando a Assamaka», en el extremo norte de Níger, precisa el medio público. La semana pasada, 1,141 migrantes en situación irregular, originarios del África subsahariana y de Asia, fueron expulsados de Argelia hacia Assamaka. En Argel, esta nueva ola de expulsiones ha estado acompañada de mensajes racistas en las redes sociales, tales como «Argelia para los argelinos» o «El pueblo pide la expulsión de los migrantes subsaharianos», informa un medio local. En 2024, Argelia ha expulsado a más de 30,000 migrantes en situación irregular hacia Níger, en comparación con los 26,000 del año 2023.