En un comunicado difundido por su propia agencia, el Polisario afirma que la presidencia siria niega la presencia de sus combatientes en las prisiones del país. Un intento de respuesta mientras el Frente se enfrenta a una campaña internacional que busca clasificarlo como organización terrorista. El Polisario atribuye a la presidencia siria la ausencia de «combatientes saharauis en sus prisiones». Según un comunicado del Frente, «no hay evidencia de la presencia de combatientes saharauis en Siria, ni en sus prisiones, ni en la actualidad ni en el pasado bajo el régimen de Bashar al-Assad». Este comunicado fue publicado anoche por SPS. El texto añade que «todas las personas detenidas tras el fin de las operaciones militares eran sirios implicados en crímenes de guerra. Si se hubieran arrestado a extranjeros, las autoridades sirias habrían tratado formalmente este asunto con sus gobiernos». El Polisario celebra que «este comunicado de la presidencia siria desmienta las alegaciones marroquíes sobre la presencia» de sus milicianos en cárceles sirias. Sin embargo, esta información solo ha sido difundida por medios y redes sociales afines al movimiento separatista. La agencia oficial de noticias siria no ha mencionado el supuesto «comunicado de la presidencia». Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Siria sí ha emitido un comunicado, pero relacionado con el rechazo a «cualquier injerencia extranjera en sus asuntos internos». Convergencias políticas entre Marruecos y Siria «Al igual que Argelia, el Polisario suele publicar información falsa con fines de propaganda interna. El Frente se encuentra actualmente en un callejón sin salida mientras la campaña para incluirlo en la lista de organizaciones terroristas en Estados Unidos y otros países europeos gana nuevos apoyos», confía a Yabiladi una fuente de seguridad marroquí. Además, las relaciones políticas entre Marruecos y las nuevas autoridades en Damasco son buenas. Siria, bajo el liderazgo de Ahmed Al-Charaa, se ha acercado a los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, distanciándose de Irán y Hezbolá, una orientación política que Marruecos comparte. Se informa que «oficiales sirios están viajando entre Casablanca y Damasco para convencer a los opositores al régimen de Bashar, radicados en Marruecos desde hace décadas, especialmente inversores con nacionalidad marroquí, de regresar al país para apoyar el frágil proceso de estabilización». Marruecos está comprometido con Siria desde la caída del régimen de Bashar. Rabat ha expresado su esperanza de que los recientes desarrollos en el país «traigan estabilidad, respondan a las aspiraciones del pueblo sirio y ofrezcan un futuro mejor», según declaró Nasser Bourita el 9 de diciembre de 2024. Esta postura fue reafirmada el 30 de diciembre durante una llamada telefónica con su homólogo sirio, Assaad Hassan Al-Chibani. Posteriormente, los dos ministros se reunieron en La Meca el 7 de marzo. Además, el rey Mohammed VI envió el 4 de febrero un mensaje de felicitación a Ahmed Al-Charaa por su ascenso a la presidencia de la República Árabe Siria durante el periodo de transición. El comunicado del Polisario, del 5 de mayo, también menciona las «disculpas» del Washington Post al Frente, tras las afirmaciones del 20 de abril sobre la presencia de detenidos saharauis en cárceles sirias. Simultáneamente, partidarios del Polisario en España publican artículos en medios ibéricos denunciando la campaña que busca catalogar al Frente como una organización terrorista, mientras intentan no incomodar al presidente Donald Trump. Sin embargo, un «ministro» del Polisario ha socavado estos esfuerzos en una sola intervención al abogar por actos terroristas.