Xlinks ha suspendido su solicitud de DCO para el proyecto Marruecos – Reino Unido, a la espera de la decisión del gobierno británico sobre su oferta de contrato por diferencia (CfD), que determinará el precio al que el proyecto podrá vender la electricidad. Este paso se considera una etapa estratégica para alinear todas las fases del proyecto. Xlinks ha decidido suspender su solicitud de Orden de Consentimiento para el Desarrollo (DCO) del ambicioso proyecto de cable submarino de 4,000 km que busca llevar electricidad generada por fuentes solares y eólicas desde Marruecos hasta el Reino Unido. Esta autorización es crucial para la viabilidad de grandes proyectos de infraestructura en territorio británico. La empresa formalizó esta pausa mediante una carta dirigida a la Inspección de Planificación del Reino Unido el 14 de mayo, donde expresó su intención de esperar el resultado de su oferta para el contrato por diferencia (CfD) antes de avanzar. El CfD es un mecanismo que permite a los desarrolladores de energía renovable asegurar un precio fijo para su electricidad durante un periodo determinado, proporcionando estabilidad financiera a proyectos de gran envergadura. Xlinks espera una decisión para finales de primavera, aspirando a un precio de entre 70 y 80 libras esterlinas por megavatio-hora (MWh), más bajo que el de proyectos similares. Alineación estratégica de las fases del proyecto La Inspección de Planificación respondió con rapidez, concediendo la pausa solicitada por Xlinks el 15 de mayo. Fuentes cercanas al proyecto informaron a Yabiladi que esta medida no es una suspensión ni una cancelación, sino una estrategia para sincronizar las etapas del proyecto. «La pausa busca permitir un proceso de revisión lo más eficiente y riguroso posible, garantizando que el DCO pueda avanzar rápidamente después», explicaron. El proyecto Marruecos - Reino Unido tiene como objetivo suministrar 3,6 gigavatios (GW) de energía limpia y modulable, aprovechando instalaciones solares, eólicas y de baterías en Marruecos para abastecer al Reino Unido. Con un costo estimado de hasta 24 mil millones de libras esterlinas, se espera que este proyecto reduzca las emisiones de carbono del Reino Unido en un 10% y disminuya los precios de la electricidad al por mayor en un 9,3%. En 2022, el proyecto fue integrado en la estrategia energética del Reino Unido y fue declarado de importancia nacional en 2023. Anteriormente, Xlinks señaló retrasos en la obtención del respaldo del gobierno británico, advirtiendo que podría trasladar la iniciativa a otro país. En declaraciones a medios locales en marzo, Sir Dave Lewis, presidente de Xlinks, afirmó que los retrasos en la aprobación gubernamental podrían socavar la confianza de los inversores.