Los servicios de seguridad del puerto de Tánger-Med han desbaratado una significativa operación de tráfico internacional de drogas, logrando incautar 33 kilogramos de cocaína pura. Esta carga ilícita se encontraba hábilmente oculta en un contenedor de mercancías, que había partido de un puerto sudamericano con destino a un país árabe. El hallazgo fue posible gracias a una exhaustiva inspección del contenedor, durante la cual se descubrieron placas de cocaína escondidas en el sistema de refrigeración. La policía judicial de Tánger ha iniciado una investigación criminal, bajo la supervisión de la fiscalía competente, con el objetivo de identificar a los implicados y desmantelar las conexiones locales e internacionales de esta red delictiva.