Las autoridades aduaneras de Cagliari, una comuna en la isla de Cerdeña, Italia, han incautado un cargamento inusual procedente de Marruecos. Más de 2,000 juguetes falsificados, cuyo destino final era Túnez, fueron confiscados por las autoridades portuarias italianas. Según medios locales, las mercancías ilícitas fueron interceptadas durante un control aduanero específico en el muelle de la terminal de Porto Canale, en Cagliari. Los juguetes, de acuerdo con la misma fuente, carecían de certificaciones de seguridad, infringían las leyes de propiedad intelectual y no cumplían con las normativas de seguridad europeas. Expertos confirmaron que se trataba de imitaciones no autorizadas que afectaban a marcas reconocidas. Esta operación se enmarca en los esfuerzos continuos de la Agencia de Aduanas y la Guardia di Finanza para combatir la falsificación, proteger la salud de los consumidores y salvaguardar la economía legal. La incautación de estos productos ha dado pie a la apertura de una investigación sobre la cadena de suministro de las falsificaciones, concluyó la misma fuente.