Firmando su primer contrato profesional en la segunda división de Francia, en diciembre de 2024, Othmane Maamma ha tenido un ascenso meteórico en el fútbol mundial. En menos de un año, gana la Copa del Mundo Sub-20 con Marruecos, a pesar de las reservas iniciales de su club sobre su participación. También es coronado con el balón de oro al mejor jugador de la competición, uniéndose a Lionel Messi, Paul Pogba, Sergio Agüero y Kang-in Lee. Tras años de formación deportiva en Francia y un ascenso que comenzó hace casi un año en el fútbol profesional, Othmane Maamma se encuentra en la cúspide del éxito. Con la selección sub-20 de Marruecos, el exjugador del Montpellier y actual extremo del Watford FC ha saboreado un triunfo histórico al vencer a Argentina en la final (2-0) y levantar el trofeo del Mundial U20, celebrado esta semana en Chile. A pesar de las reservas de su club sobre su participación en la Copa del Mundo 2025, logró otro hito: el Balón de Oro al mejor jugador del torneo. Esta consagración reconoce el talento excepcional del nativo de Alès, quien firmó su primer contrato profesional a los 19 años con el Montpellier, en diciembre de 2024. Luego de que su club formador descendiera a la Ligue 2, el verano pasado, el capitán de los Leones del Atlas dio el salto al Watford FC. Apenas unas semanas después de cumplir 20 años, se une al selecto grupo de Lionel Messi, Sergio Agüero, Paul Pogba y Kang-in Lee, todos coronados antes que él con el Balón de Oro sub-20. De un logro a otro La épica final contra Argentina fue el colofón de una gesta colectiva, bajo la dirección de Mohamed Ouahbi, donde Othmane Maamma brilló a lo largo del Mundial U20. Su desempeño por la banda izquierda, su imprevisibilidad y sus habilidades defensivas atormentaron a los equipos rivales. Con cuatro asistencias que lo convirtieron en el mejor pasador de esta edición, un gol y una mezcla de cualidades técnicas y tácticas, es ampliamente elogiado por su potencial como gran regateador, al estilo de Cristiano Ronaldo o Vinícius Jr. Mohamed Ouahbi en el Mundial U20: «Lo único que había que hacer era ganar la copa» [vídeo] Junto a sus compañeros, el número siete fue indudablemente un artífice de consagraciones. Primero, el equipo se convirtió en la primera selección de Marruecos en clasificarse para una final mundial en todas las categorías. En el campo, Othmane Maamma causó sensación, siendo el jugador del partido en los cuartos de final contra Estados Unidos (3-1) y en la semifinal contra Francia (1-1 a.p., 5-4 en penales). De manera lógica, se lleva el Balón de Oro en la final. «Cada vez que toca el balón, todo el estadio contiene el aliento, esperando presenciar una hazaña que solo él puede realizar», escribió la FIFA. Más allá de su talento innato en el campo, de sus capacidades físicas y de su experiencia adquirida, otra fuerza hace de Othmane Maamma, al igual que sus compañeros, jugadores que merecen estar en la cima del mundo futbolístico. Para él y para el resto de la selección, la mentalidad sigue siendo una clave del éxito, como explicó durante el Mundial U20, citado por la Federación Internacional: «Cuando eres futbolista, debes mantenerte positivo. Después de todo, tenemos un equipo increíble, lleno de jugadores talentosos y un excelente cuerpo técnico. Todos se sienten muy bien y, sinceramente, la eliminación nunca pasó por nuestra mente. En ningún momento el regreso al club fue una opción. Queremos llegar lo más lejos posible, porque sabemos que tenemos las capacidades para hacerlo. Entonces, ¿por qué detenernos aquí?» Othmane Maamma Una mentalidad más allá del fútbol Comentando sobre esta mentalidad ante la FIFA, Othmane Maamma explica que «cada uno [de los jugadores] sabe que debe entregarse al 200%, porque portar esta camiseta implica enormes responsabilidades». «Hay que llevarla con orgullo, no podemos permitirnos engañar. Debemos darlo todo, y eso es lo que hemos hecho desde el comienzo de la competición», dijo. A un paso del podio, el capitán de Marruecos U20 convenció por sus cualidades profesionales y conquistó incluso a los aficionados extranjeros, al punto que el Watford FC terminó mostrándole su apoyo en varias ocasiones. Satisfecho por el inédito logro de su estrella, el club multiplicó los mensajes de simpatía a través de los compañeros del extremo. Coronado con el título mundial, Othmane Maamma dedica camisetas del equipo desde su regreso. En el Mundial U20 de Chile, la simpatía contagiosa alrededor de la selección y entre los fanáticos no marroquíes fue confirmada por Mohamed Ouahbi. Refiriéndose a la consagración histórica de Marruecos, el entrenador expresó su gratitud especialmente al público chileno y extranjero. Ilustrando estos valores del fútbol más allá de la competición, Othmane Maamma dejó una huella en los jóvenes amantes del fútbol en el país anfitrión. En un gesto altamente simbólico tras la final, el jugador regaló sus zapatos de partido a un niño chileno, que había animado al equipo de Marruecos con sus padres desde fuera del estadio. En un vídeo difundido en línea por internautas, la mirada maravillada del niño y la alegría expresada por sus padres muestran lo que Othmane Maamma y los Leones del Atlas nunca dejaron en el banquillo: el fútbol permite crear talentos y ejemplos a seguir.