BRUSELAS - El secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), Javier Garat, ha asegurado que ve "buena disposición" de Bruselas para renovar el acuerdo pesquero entre la UE y Marruecos que expira el próximo febrero y que está pendiente de negociación formal, tras una reunión en la capital europea con la comisaria de Pesca, Maria Damanaki. "Hay buena disposición por las dos partes y esperan que en breve, quizá en un par de semanas, pueda haber noticias", ha resumido Garat a los medios al término de la reunión. Pescadores españoles y marroquíes se reunieron la semana pasada para pedir la rápida renovación de un acuerdo que concede 119 licencias a la flota comunitaria, de la que un centenar corresponden a buques españoles. El representante de Cepesca ha explicado que Damanaki se ha pronunciado de manera "positiva" porque tras las "dificultades" que ha encontrado en el último año por la "ausencia de respuesta durante varios meses" de parte de Marruecos, la situación ha cambiado en enero y han enviado información. Garat ha insistido en que Marruecos ha expresado su disposición a "modificar algunos aspectos técnicos si así se requiere" del protocolo que debe ser renovado antes del próximo 27 de febrero. Los servicios jurídicos de la Eurocámara señalaron "dudas" sobre si el actual convenio respeta los derechos de la población del Sáhara occidental y Damanaki decidió pedir información adicional a Rabat para aclarar éste y otros puntos antes de pronunciarse sobre la renovación. La comisaria consideraba insuficientes los datos facilitados por las autoridades marroquíes y propuso estudiar excluir la explotación de los recursos en aguas saharauis, pero no logró el apoyo de otros comisarios, según fuentes comunitarias. La exclusión de los recursos en aguas saharauis del acuerdo pesquero es algo que también reclama la población de la ex colonia española, pero que el Reino de Marruecos no aceptaría "en ningún caso", según Garat. El secretario general de Cepesca ha confiado en que avancen las negociaciones en marcha entre Bruselas, en nombre de los 27, y Marruecos y ha opinado que "no debe de haber muchas dificultades" porque "las dos partes están interesadas" y, en todo caso, quedan "cuestiones técnicas" por resolver.