Ayer por la tarde, cientos de personas atendieron la convocatoria de diversas organizaciones de la sociedad civil, entre ellas la Iniciativa Marroquí de Apoyo y Defensa, para protestar contra la implicación de Estados Unidos en el respaldo militar a Israel. Los manifestantes sostienen que estas transferencias de armas convierten a Washington en cómplice del genocidio en curso en la Franja de Gaza, así como de la prolongada ocupación en Cisjordania. En Salé, la concentración se llevó a cabo en la plaza de Bab Mrissa. Con banderas palestinas y marroquíes en alto, los asistentes corearon consignas que denunciaban «el silencio del mundo» y reafirmaron su solidaridad con el pueblo palestino. «Marruecos y Palestina son un solo pueblo», se leía en las pancartas, según informa el corresponsal de la agencia Anadolu. Durante la manifestación, Abdelhafid Sriti, coordinador del Grupo de Acción para Palestina, tomó la palabra. Acusó al gobierno israelí de llevar a cabo «destrucción, corrupción y criminalidad» en la Franja de Gaza, con el apoyo, según él, de Washington y varias capitales occidentales, según complementa la agencia de prensa. En Tánger, se llevó a cabo una movilización similar el mismo día. Según los videos compartidos por Hassan Bennajeh, miembro del secretariado general del círculo político de Al Adl Wal Ihsane, los manifestantes expresaron los mismos mensajes: indignación por los bombardeos sobre civiles, solidaridad con el pueblo palestino y rechazo a la inacción internacional. Estas movilizaciones se producen en un contexto de crisis humanitaria extrema. Le Monde, citando al Ministerio de Salud en Gaza y la UNRWA, informó el miércoles 11 de junio que más de 55,000 personas han sido asesinadas por el ejército israelí desde el 7 de octubre de 2023, una cifra validada por la ONU. En la Franja de Gaza, cerca de 2,700 niños sufren actualmente de malnutrición aguda, mientras el sistema de salud colapsa en el norte del territorio.