La prestigiosa etiqueta internacional «Bandera Azul» ondeó el viernes en la playa de Essaouira por vigésimo primer año consecutivo. Este distintivo, otorgado anualmente por la Fundación para la Educación Ambiental (FEE), ha sido promovido en Marruecos desde 2002 por la Fundación Mohammed VI para la Protección del Medio Ambiente, presidida por la princesa Lalla Hasnaa. En el marco del programa nacional «Playas Limpias», se celebró una ceremonia oficial para conmemorar la certificación de la playa de la ciudad de los Alisios. El evento contó con la presencia del gobernador de la provincia, Mohammed Rachid, así como representantes de las autoridades locales y de seguridad, jefes de servicios exteriores, actores de la sociedad civil y otras personalidades destacadas. En declaraciones a la MAP, el director de puertos de la región de Marrakech-Safi, Mohammed Hassou, destacó que esta distinción es el resultado de un esfuerzo colectivo para mejorar la calidad de las aguas de baño, reforzar las instalaciones de la playa, promover la cultura ambiental y garantizar la accesibilidad para personas con necesidades específicas. Hassou también reafirmó que la Agencia Nacional de Puertos (ANP), como institución comprometida, renueva su dedicación a fomentar la cultura ambiental y sensibilizar a las nuevas generaciones sobre la importancia de proteger el medio ambiente y el papel crucial de las playas. Durante la jornada, se instalaron puestos de sensibilización gestionados por diversas asociaciones y organizaciones locales, con el objetivo de informar a los visitantes sobre buenas prácticas ecológicas e iniciativas locales de protección ambiental. La etiqueta «Bandera Azul» ondeará en 28 playas, un lago de montaña y cuatro puertos deportivos durante la temporada de verano de 2025. Con un total de 33 sitios certificados, Marruecos se posiciona en el puesto 21 a nivel mundial entre 50 países. Además, el reino se destaca como el primer país árabe y el segundo en África en cuanto al número de sitios certificados con la «Bandera Azul», una ecoetiqueta exigente que simboliza la ejemplaridad en la gestión ambiental de los espacios de baño.