El imán marroquí-neerlandés Youssef Msibih ha sido suspendido de su cargo en la mezquita Bilal, en Alkmaar. Se había unido a una delegación controvertida de representantes musulmanes europeos que se reunió con el presidente israelí Isaac Herzog en Jerusalén. Esta visita ha provocado fuertes reacciones por parte de los clérigos musulmanes en los Países Bajos. Denuncian una traición a los valores islámicos, mientras Israel está en guerra en Gaza. Esta semana, Youssef Msibih se convirtió en el centro de la atención mediática tras una polémica visita a Israel. El imán marroquí-neerlandés, que ejercía en la mezquita Bilal de Alkmaar, en los Países Bajos, fue suspendido de sus funciones luego de unirse a una delegación de líderes musulmanes europeos que se reunió con el presidente israelí Isaac Herzog el pasado 7 de julio en Jerusalén. La visita fue organizada por el European Leadership Network (ELNET), una ONG «dedicada a fortalecer las relaciones entre Europa e Israel». La mezquita Bilal reaccionó rápidamente, anunciando en Instagram que su consejo había suspendido a Msibih «con efecto inmediato». En un comunicado en su sitio web, la mezquita aclaró: «No hay lugar para el imán en la mezquita. El consejo no asume ninguna responsabilidad por sus declaraciones o acciones fuera de la mezquita. Ya no existe una relación formal o sustancial entre él y la mezquita Bilal Alkmaar». La misma fuente subrayó que Msibih había actuado «a título personal y completamente en ruptura con la visión de la mezquita y su comunidad». «No hay lugar para los alborotadores o la división», insistió el comunicado. Recibido por el presidente israelí Fotos y videos compartidos por la cuenta oficial de X (anteriormente Twitter) del presidente israelí muestran a Msibih vestido con un atuendo tradicional marroquí, interpretando una versión en árabe del himno nacional israelí durante el encuentro. La delegación estaba compuesta por 15 figuras religiosas musulmanas de Europa: Francia, Italia, Bélgica, Reino Unido y los Países Bajos. El itinerario incluyó visitas al Knesset, sitios religiosos en Jerusalén Este, además de reuniones con responsables militares israelíes y sobrevivientes de ataques. También se programó una visita a Yad Vashem, el memorial del Holocausto de Israel, y al sitio de un ataque con misiles iraníes en Tel Aviv. El presidente Isaac Herzog recibió al grupo, destacando la importancia del diálogo judeo-musulmán y presentando la visita como un avance contra las «fuerzas radicales». «Ustedes representan el mundo de la fraternidad, la humanidad y la libertad». Las palabras del imán Hassen Chalghoumi de Francia hoy. Me emocionó e inspiró conocerlo, así como a una delegación liderada por @elnet_global de imanes y líderes comunitarios musulmanes de toda Europa. Se mantienen valientemente… pic.twitter.com/gpJja2tQne — יצחק הרצוג Isaac Herzog (@Isaac_Herzog) 7 de julio de 2025 Otro imán marroquí El grupo estaba liderado por Hassen Chalghoumi, el controvertido imán de Drancy, Francia, conocido por su postura pro-israelí. Entre los otros miembros de la delegación se encontraban Noor Dahri, un comentarista británico sobre contraterrorismo afiliado a la Henry Jackson Society, así como Ali El Aarja, un imán de origen marroquí radicado en Turín, Italia. En declaraciones al Times of Israel, El Aarja, quien dirige la recién formada Confederación Islámica Italiana (CIIN), afirmó que Marruecos es «un país abierto a todas las religiones: musulmanes, cristianos y judíos viven juntos». «Estamos aquí para enviar un mensaje de paz—para nuestros hermanos palestinos y nuestros hermanos judíos. No queremos guerra; esperamos poder volver al diálogo», añadió. El Times of Israel también destacó que Youssef Msibih había servido como líder religioso en los Países Bajos, Bélgica y Noruega durante casi 20 años. Según una biografía compartida por ELNET, él cursó estudios religiosos en la Universidad Al-Azhar, en Egipto, y continuó su formación en el Instituto Mohammed VI para la formación de imanes y mourchidines en Rabat, Marruecos. Una visita criticada en los Países Bajos y Marruecos La visita generó fuertes reacciones entre los representantes musulmanes en los Países Bajos. El 7 de julio, la Iniciativa de imanes y predicadores en el país emitió una declaración contundente, condenando un «acto moralmente reprobable», contrario a los principios del Islam y la dignidad humana. El organismo acusó a la delegación de ayudar al «régimen de ocupación sionista» a mejorar su imagen «manchada con la sangre de hombres, mujeres y niños inocentes». Mientras tanto, en Marruecos, el Observatorio marroquí contra la normalización condenó un «crimen más allá de la normalización». Calificó esta visita como una traición a la religión y los valores humanos, en el contexto de la guerra continua de Israel en Gaza. En un comunicado compartido el martes en Facebook, la instancia opinó que los miembros de la delegación «no representan a los imanes europeos».