En el marco de su compromiso con la seguridad del suministro de agua potable en la región de Souss-Massa, la Oficina Nacional de Electricidad y Agua Potable (ONEE) ha iniciado este miércoles las obras de duplicación de un tramo clave de la conducción regional que proviene de la presa Moulay Abdellah, situada al norte de Agadir. El director general de la ONEE, Tarik Hamane, junto con el wali de la región de Souss Massa y gobernador de la prefectura de Agadir Ida Outanane, Saaïd Amzazi, han dado inicio a este proyecto estratégico, que forma parte del programa de gestión del estrés hídrico. El objetivo es canalizar las aguas desde la estación de tratamiento de Tamri, que ahora cuenta con una capacidad de 1100 litros por segundo gracias a su ampliación por parte de la ONEE, hacia los depósitos de la ciudad de Agadir. Además, se pretende transferir el agua potable que producirán dos plantas monobloque de desalinización, actualmente en construcción, con una capacidad total de 200 litros por segundo. El proyecto también busca fortalecer la seguridad del suministro de agua potable en la región durante los trabajos de mantenimiento sistemático de la planta de desalinización de agua de mar en Chtouka Ait Baha, y mejorar la flexibilidad en la gestión de los recursos superficiales de las presas de Abdelmoumen y Moulay Abdellah. En declaraciones a la prensa, Hamane destacó que este proyecto estratégico, con una inversión total de 132 millones de dirhams, está previsto para entrar en funcionamiento en diciembre de 2025. Consiste en el suministro, transporte e instalación de 13 kilómetros de tuberías de aducción de acero revestido, con un diámetro de 1000 mm. Coincidiendo con la celebración del 72º aniversario de la Revolución del Rey y del Pueblo y la Fiesta de la Juventud, este ambicioso proyecto responde a las crecientes necesidades de agua potable del Gran Agadir, reafirmando el papel de la ONEE en la implementación de proyectos de esta naturaleza.