La colaboración industrial entre Marruecos y el fabricante turco Baykar Technologies está entrando en una fase crucial. Los trabajos para establecer una planta de producción de drones en Benslimane avanzan a buen ritmo. Esta ciudad también ha sido seleccionada por Lockheed Martin para instalar su fábrica destinada al mantenimiento y modernización de los aviones F-16 y C-130 Hercules de las Fuerzas Armadas Reales. Como resultado de un acuerdo estratégico firmado en diciembre de 2024, se espera que la planta esté operativa para 2026. «Se enfocará en la fabricación y mantenimiento de drones de nueva generación, diseñados específicamente para satisfacer las necesidades operativas de las Fuerzas Armadas Reales (FAR). No se trata simplemente de replicar modelos de drones ya adquiridos por Marruecos, sino de un avance tecnológico significativo que marcará un antes y un después para la industria militar nacional», confía a Yabiladi una fuente cercana al proyecto. A diferencia de los modelos Bayraktar TB2 actualmente en servicio, los nuevos drones producidos en Marruecos ofrecerán capacidades mejoradas en términos de autonomía, discreción e integración de sistemas de armas inteligentes. La llegada de Baykar se enmarca en la estrategia de soberanía industrial que Marruecos ha estado impulsando durante varios años en los sectores aeronáutico y de defensa, complementando los proyectos desarrollados con Lockheed Martin y Thales. «El objetivo es crear un ecosistema nacional completo, capaz de diseñar, producir y mantener material militar de alta tecnología en suelo marroquí», añade la misma fuente.