En su 16ª edición, el Festival Internacional de Cine Documental de Agadir (FIDADOC) reafirmó su rol crucial en el impulso y valorización del cine documental en Marruecos y el continente africano. Celebrado del 13 al 18 de junio, este evento reunió a cineastas, críticos, productores y entusiastas en torno a los temas de la familia, las comunidades y los ecosistemas creativos. Las películas presentadas exploraron principalmente cuestiones de parentalidad, vínculos intergeneracionales, herencia e identidad. Estos temas universales resonaron profundamente, especialmente entre los jóvenes cineastas, muchos de los cuales presentaban su primera o segunda obra. El público pudo apreciar una diversidad de enfoques, un gusto por la narración personal y una clara necesidad de transmisión, ya sea de memoria, cultura o valores. El FIDADOC es también una verdadera colmena, tanto en sentido literal como figurado. Durante más de una década, la Colmena Documental ha apoyado a cientos de jóvenes autores marroquíes, africanos y de las diásporas. Con el tiempo, esta comunidad ha crecido, se ha estructurado y profesionalizado. Varios de los filmes presentados este año son el resultado de estos procesos, desarrollados a través de residencias de escritura panafricanas, talleres como Producir en el Sur y programas de mentoría personalizados que ofrece el festival. La ambición del FIDADOC es sacar al documental de sus márgenes, convirtiéndolo en una herramienta cultural poderosa, duradera y accesible, capaz de narrar de manera innovadora las sociedades, sus rupturas y esperanzas. Al dar visibilidad a jóvenes voces del sur y apostar por la formación y el acompañamiento a largo plazo, el festival contribuye activamente al surgimiento de un cine documental marroquí y africano de calidad, arraigado pero abierto al mundo. Esta edición también destacó varias coproducciones internacionales, con películas provenientes de Líbano, Senegal, Italia y Canadá, que abordan temas sensibles como la memoria familiar, la guerra, las luchas sociales y las relaciones de género. Entre los invitados, uno de los momentos más destacados fue el homenaje a la directora india Nishtha Jain, una figura imprescindible del documental social y político.