Las autoridades italianas especializadas en delitos financieros, tráfico de drogas y leyes aduaneras han desmantelado una sofisticada red internacional de tráfico de hachís y marihuana. Esta organización, con raíces en los barrios de Casal Boccone y Fonte Meravigliosa en Roma, tenía como principal fuente de estupefacientes a Marruecos. En el marco de una investigación liderada por la fiscalía antimafia de Roma y ejecutada por la Unidad de Policía Económica y Financiera (GICO), dieciséis personas han sido objeto de medidas cautelares: trece han sido encarceladas y tres más han sido puestas bajo arresto domiciliario. La organización operaba con una estructura jerárquica y logró importar más de 1,4 toneladas de hachís y marihuana desde Marruecos a través de España, utilizando rutas terrestres para cruzar la frontera italiana, según medios locales. Las drogas se distribuían a mayoristas que abastecían distintos barrios de Roma, como Don Bosco, Pigneto, Spinaceto y Capannelle, así como a provincias vecinas, incluyendo Latina. La banda mantenía un «fondo común» para remunerar a sus miembros y apoyar a los asociados encarcelados y a sus familias, lo cual reforzaba la cohesión del grupo. Durante la operación, los investigadores incautaron más de 660 kg de hachís, más de 50 kg de marihuana, armas de fuego, vehículos modificados con compartimentos ocultos y dispositivos de comunicación encriptados. Los cargos presentados contra los sospechosos incluyen tráfico internacional de drogas, posesión ilegal de armas, robo, receptación de bienes robados y lavado de dinero.