Cada vez más turistas británicos eligen Marruecos en lugar de los destinos europeos tradicionales como España, Italia y Portugal. Este cambio se debe a la accesibilidad económica de Marruecos, su cercanía y sus variados paisajes, así como al creciente sentimiento de anti-turismo en algunas regiones de Europa. Con la llegada del verano, un creciente número de turistas británicos está optando por dejar de lado los tradicionales destinos europeos como Francia, España y Portugal, para aventurarse hacia el norte de África, con Marruecos a la cabeza. Expertos en aviación han observado un notable incremento en los vuelos desde el Reino Unido hacia esta región, impulsados por opciones de viaje más económicas como Marruecos, Túnez y Egipto. De acuerdo con datos recientes de la empresa de análisis aeronáutico Cirium, ampliamente difundidos por los medios británicos, se prevé que en 2025 despeguen 19 847 vuelos desde aeropuertos británicos hacia el norte de África, más del doble de los 8 653 vuelos registrados en 2019. Este fenómeno no ha pasado desapercibido para las empresas del sector turístico. Tui reporta una fuerte demanda hacia Marruecos, destacando su atractiva relación calidad-precio, mientras que Booking.com ha registrado un aumento del 39 % en las búsquedas de vacaciones de verano en este país. Atractivo y cercanía Especialistas en viajes resaltan que Marruecos, junto a otros destinos del norte de África, ofrece una excelente relación calidad-precio, atrayendo a turistas británicos que buscan cuidar su presupuesto y que de otro modo optarían por Europa continental. Por ejemplo, una semana en Agadir, conocida por sus playas y el pueblo de surf de Taghazout, cuesta alrededor de 889 £ por persona, en contraste con destinos europeos como Santorini, Mykonos o Marbella, donde los precios oscilan entre 1 000 £ y 2 700 £ por persona, según los medios británicos. La cercanía es otro factor atractivo. Con boletos de ida y vuelta desde 30 £, muchos optan por excursiones de un día o estancias cortas, seducidos por el clima agradable y las experiencias accesibles. Por ejemplo, una turista británica pasó solo siete horas en Agadir con su hijo, disfrutando de la playa, el teleférico y la cocina local por un total de 120 £. Viajes exprés a Marruecos: Una nueva tendencia inusual de los ingleses Aumento del anti-turismo en Europa Además del aspecto económico y la cercanía, Marruecos cautiva con sus paisajes diversos, que abarcan desde el Sahara hasta playas y montañas, y su clima agradable durante todo el año, convirtiéndolo en un destino ideal. Por otro lado, el creciente sentimiento anti-turismo en algunas regiones de Europa también podría estar influyendo en este cambio de rumbo. A principios de junio, residentes en España y otros países europeos se manifestaron contra el turismo masivo, denunciando el aumento de los costos de vivienda que excluye a los habitantes de sus propias ciudades. Las manifestaciones más grandes tuvieron lugar en Mallorca y Barcelona, con demostraciones similares en Lisboa y Venecia, donde los manifestantes marcharon, portaron pancartas e incluso rociaron a los turistas con pistolas de agua.