Ricos en una historia común a lo largo de varios siglos a través del pasado de Al-Ándalus y la huella cultural que dejó, los territorios de Sevilla y Marruecos se alimentan de este legado para capitalizar el futuro. La contribución histórica y las culturas ancestrales se convierten ahora en elementos fundamentales para la prospección turística de la provincia española, que pone su mirada en los turistas marroquíes. El Mundial de Fútbol 2030 representa una oportunidad única para fortalecer la cooperación entre los países anfitriones: Marruecos, España y Portugal. Sin embargo, esta colaboración no se limita únicamente a este evento deportivo de gran magnitud. El turismo cultural entre Marruecos y España también promete un futuro brillante. En este contexto, la provincia de Sevilla aspira a convertirse en un destino de primer nivel para los turistas marroquíes, capitalizando los lazos históricos y culturales que comparten ambos territorios. Con un rico pasado histórico vinculado a Al-Ándalus, esta iniciativa se proyecta hacia el presente y busca un futuro sostenible. Esto se manifiesta en el plan de acción de promoción turística «Destino Sevilla» 2025, desarrollado en colaboración con la embajada de España en Marruecos y la Cámara de Comercio Española en Casablanca. Los ejes principales del plan fueron presentados el miércoles 25 de julio de 2025, en la sede de la representación española en Rabat. Cómo las fuentes medievales árabes permitieron escribir la historia de Al-Ándalus El evento reunió a operadores turísticos, agentes de viajes, representantes institucionales marroquíes y miembros del cuerpo diplomático, y estuvo marcado por la presentación del plan de acción, elaborado por el organismo de desarrollo económico local Prodetur, en colaboración con asociaciones de empresas turísticas de la provincia. Durante su intervención, el embajador de España en Rabat, Enrique Ojeda, oriundo de Sevilla, destacó los lazos históricos entre su ciudad natal y Marruecos. Dinamizar el turismo para redescubrir la Historia común El diplomático subrayó la importancia de este acercamiento entre ambas orillas, a través de iniciativas concretas y orientadas hacia el futuro. «La presencia de Sevilla en Rabat no es solo una actividad promocional, sino un medio para reconectar con un elemento esencial de nuestra identidad común. Hoy en día, el turismo es un medio privilegiado para construir puentes duraderos entre nuestros pueblos», declaró, citado por la agencia Europa Press. Historia: La contribución de Ziryab a la cocina en el Mediterráneo y en Al-Ándalus Rodrigo Rodríguez Hans, vicepresidente de Prodetur, también destacó el vínculo histórico entre la provincia de Sevilla y Marruecos. «El patrimonio andaluz, tan presente en nuestras calles, en nuestro patrimonio histórico y en nuestra forma de vivir, nos une de manera natural y duradera», afirmó. «Por eso, nos presentamos ante ustedes no solo como un destino turístico cercano, sino también como un espacio de encuentros culturales, económicos y humanos», añadió el responsable, al frente de la delegación de Sevilla en Rabat. En este espíritu de acercamiento cultural e histórico como motor para el turismo, el encuentro concluyó con un concierto del pianista David Peña Dorante, cuya obra de flamenco simboliza precisamente «un puente» renovador entre las culturas, según un comunicado. Historia: Gharb Al-Ándalus, la parte rica y menos conocida del Portugal arabo-musulmán La delegación sevillana estuvo compuesta por Manuel Cornax, presidente de la comisión de turismo de la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES) y de la Asociación Hotelera de Sevilla y provincia, Rafael Domínguez, director de la Asociación de Empresas Turísticas de Sevilla (ASET), María Ceballos, vicepresidenta de la Plataforma de Turismo Activo de la provincia, y Manuel Domínguez, presidente del Skal Club Sevilla y de la Asociación del centro de Sevilla.