En un comunicado, el Partido del Progreso y del Socialismo ha condenado enérgicamente el «grave escándalo» desvelado por las grabaciones publicadas por el periodista Hamid El Mahdaoui durante una sesión del «Comité de Etica» de la Comisión provisional encargada de los asuntos de la prensa y la edición. El partido expresó su profunda preocupación por la situación del periodismo en Marruecos, destacando que ha alcanzado un «nivel de decadencia sin precedentes». Según la organización política, esto dibuja un panorama sombrío del entorno mediático y del espacio democrático en general. El partido señala directamente al gobierno actual como responsable de esta situación, criticando su debilidad política y comunicativa, así como sus intentos de transformar la autorregulación de la profesión en una herramienta de control superficial para acallar las voces críticas. El partido recordó que ya había advertido sobre los peligros de las acciones gubernamentales «desde el comienzo de la crisis provocada en torno a la renovación del Consejo Nacional de la Prensa, hasta las medidas gubernamentales posteriores, en total contradicción con las exigencias de una autorregulación libre, independiente y democrática de los asuntos de la prensa y la edición». Según el partido, estas acciones culminaron en un intento de aprobar una ley a medida para beneficiar a los lobbies financieros en la reorganización del Consejo Nacional de la Prensa. El partido expresó su solidaridad con el periodista Hamid El Mahdaoui y solicitó una investigación sobre las revelaciones de las grabaciones, que ponen de manifiesto los métodos peligrosos del Comité de Etica, cuyo mandato ya ha expirado, así como del comité temporal en su conjunto. Este último debería ser disuelto y se deberían iniciar procedimientos legales. Finalmente, el partido exigió que el gobierno retire el «proyecto de ley funesto, regresivo y antidemocrático relativo a la reorganización del Consejo Nacional de la Prensa».