La policía detuvo el domingo por la noche en Casablanca a 21 jóvenes involucrados en una manifestación en la autopista urbana a la entrada del barrio Corea. Esta concentración sembró el caos y provocó un importante atasco. Respondiendo a llamados en las redes sociales por parte de activistas de la «Gen Z 212», decenas de jóvenes, algunos de ellos enmascarados, se congregaron en la autopista. Corearon consignas exigiendo libertad, justicia social y reformas en los sectores de salud y educación, bloqueando así el tráfico en ambos sentidos. Las personas arrestadas fueron puestas bajo custodia y serán presentadas ante el fiscal del Rey. Por otro lado, la Secretaría General de la Organización Marroquí de Derechos Humanos y Lucha contra la Corrupción difundió un comunicado condenando firmemente estos eventos, calificándolos como un «grave acto criminal» que no puede ser asimilado a la libertad de expresión o a una manifestación pacífica, ya que obstaculizó el paso de ambulancias y ciudadanos. La organización instó al fiscal a llevar a cabo una investigación rápida y a procesar judicialmente a todas las personas involucradas, conforme al artículo 507 del Código Penal. También expresó su descontento ante la rápida liberación de algunos detenidos y denunció los lanzamientos de piedras contra las fuerzas del orden durante su intervención. Reafirmó que, si bien la libertad de expresión es un derecho legítimo, no debe comprometer la seguridad de los ciudadanos, insistiendo en que el interés nacional debe prevalecer sobre todas las demás consideraciones.