Marruecos sigue consolidando su posición como un destino destacado del fútbol en África, mientras se prepara para acoger la CAN 2025. Este regreso tiene un simbolismo importante, 38 años después de la edición de 1988, durante la cual el país salvó a la Confederación Africana de Fútbol (CAF) tras la retirada repentina de Argelia. El mundo del fútbol tiene sus ojos puestos en Marruecos, que se prepara para ser el anfitrión de la 35ª edición de la Copa Africana de Naciones (CAN 2025). El reino fue seleccionado para albergar este prestigioso torneo, superando en una reñida competencia a las candidaturas de Argelia, Nigeria y Benín. Esta edición marca el regreso de Marruecos como organizador del evento futbolístico más importante del continente, después de haber acogido la edición especial de 1988. Marruecos, el salvador de la CAF en 1988 La elección de Marruecos como sede en 1988 fue un salvavidas para la Confederación Africana de Fútbol (CAF), que enfrentaba un dilema organizativo. Zambia, el anfitrión original designado en 1986, se retiró por problemas financieros, lo que llevó a la CAF a aceptar la propuesta de Argelia para llenar el vacío. No obstante, menos de un año después, la relación entre Argelia y la CAF se deterioró debido a una controversia sobre la repetición de un partido de clasificación para los Juegos Africanos de 1987 contra Túnez. La disputa surgió por la participación de dos jugadores argelinos no elegibles. En señal de protesta, la Federación Argelina decidió no organizar la Copa Africana de Naciones, lo que obligó a la CAF a buscar un nuevo anfitrión con urgencia. Marruecos, con su infraestructura preparada, incluyendo el Complejo Mohammed V en Casablanca y el Complejo Moulay Abdellah en Rabat, fue la opción más viable y rápida. El torneo se desarrolló bajo un formato de eliminación directa, con seis equipos clasificados que se unieron a Marruecos, el país anfitrión, y a Egipto, el campeón defensor. Los ocho equipos se dividieron en dos grupos: el Grupo A en Casablanca, compuesto por Marruecos, Argelia, Zaire y Costa de Marfil. Marruecos lideró el grupo con cuatro puntos tras vencer a Argelia, que se clasificó en segundo lugar con tres puntos. El Grupo B, que jugó en Rabat, incluyó a Egipto, Camerún, Nigeria y Kenia. Nigeria y Camerún dominaron el grupo, ambos con cuatro puntos. En las semifinales, Camerún derrotó a Marruecos con un único gol, mientras que Nigeria venció a Argelia en una tanda de penales. En el partido por el tercer puesto, Argelia se impuso a Marruecos en los penales tras un empate 1-1. Camerún se coronó campeón del continente al vencer a Nigeria en la final con un solo gol, consiguiendo así su segundo título continental. Marruecos, el sustituto de Guinea Al igual que en 1988, Marruecos no fue la primera opción para acoger la CAN 2025. Inicialmente, la CAF había otorgado la organización a Guinea, pero revocó esta decisión tras confirmar que la infraestructura del país no podía albergar un torneo ampliado a 24 equipos. Marruecos había sido designado anteriormente para acoger la edición de 2015, pero se retiró debido a preocupaciones sanitarias relacionadas con la epidemia de Ebola en África Occidental. La CAF respondió con dureza, excluyendo a la selección nacional de las ediciones de 2017 y 2019 e imponiendo una multa de casi 9 millones de dólares como «compensación por los daños» a la confederación continental. Posteriormente, la Federación Real Marroquí de Fútbol (FRMF) apeló al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que falló a favor de Marruecos, anulando todas las sanciones deportivas y reduciendo la multa al mínimo estipulado en los reglamentos de la CAF, fijado en solo 50,000 dólares.