Este jueves por la noche, los habitantes de Aït Bouguemez volvieron a sus hogares tras llevar a cabo una marcha pacífica de protesta hacia la sede provincial de Azilal. Reclaman un desarrollo que sienten ha sido desatendido por años. La decisión de regresar se tomó después de una reunión con el gobernador de la provincia, quien se comprometió a atender varias demandas urgentes en un plazo máximo de diez días, según informó un miembro del comité organizador a «Yabiladi». Hassan Laakoun, participante en la marcha, confirmó que el gobernador respondió positivamente a las solicitudes de los residentes, alcanzando un acuerdo verbal, aunque sin documento firmado, para cumplir con tres demandas principales en el plazo estipulado. La primera promesa se centra en mejorar la cobertura de la red móvil, con el compromiso de las autoridades de asegurar una cobertura completa en las diversas áreas de Aït Bouguemez en el tiempo acordado. En cuanto al sector salud, se anunció una colaboración con una organización, bajo un sistema de contratación, para garantizar la presencia de un médico permanente en la región. Respecto a los permisos de construcción, se acordó coordinar con la comunidad rural para otorgar permisos gratuitos en los pueblos remotos no conectados a las vías principales. Laakoun señaló que el gobernador también prometió visitar la región para reunirse con los líderes comunitarios y discutir otros temas planteados por los habitantes, especialmente en educación e infraestructuras. Además, reveló que el gobernador planea construir siete campos deportivos en la provincia, uno de los cuales beneficiará a los residentes de Aït Bouguemez. La marcha congregó a más de un millar de manifestantes de unos 27 pueblos, quienes corearon consignas para poner fin al aislamiento de su región montañosa, enclavada en el corazón del Alto Atlas.