El embajador de Argelia en Estados Unidos, Sabri Boukadoum, defendió la postura de su país sobre el conflicto del Sáhara Occidental en una reciente entrevista con un grupo de expertos estadounidenses. Boukadoum afirmó que Argelia «no habla en nombre del Polisario» y subrayó que «nadie puede imponer una solución a los saharauis». Durante la conversación, y con cierta indulgencia por parte del presentador, el diplomático añadió que Argelia, junto con Mauritania, puede desempeñar un papel facilitador en la resolución del conflicto. Boukadoum reiteró la posición de Argel al afirmar que «el Sáhara Occidental es una cuestión de descolonización aún pendiente en la agenda de las Naciones Unidas». Además, defendió que «el Polisario no es una organización terrorista». En el ámbito estadounidense, el senador republicano Joe Wilson presentó un proyecto de ley en el Congreso para incluir al Frente Polisario en la lista de entidades terroristas de Washington. Esta iniciativa llevó al embajador argelino a reunirse con el congresista demócrata Jimmy Panetta, en un intento fallido por convencerlo de retirar su apoyo al proyecto de ley de Wilson. El embajador también reafirmó que su país no es parte del conflicto del Sáhara, y llamó a «las dos partes, Marruecos y el Frente Polisario, a entablar negociaciones directas». Estas declaraciones de Sabri Boukadoum se producen en un momento en que el representante permanente de Marruecos ante las Naciones Unidas, Omar Hilale, intensifica su presencia en los medios internacionales.
