El proyecto de resolución estadounidense provoca revuelo en los campamentos de Tinduf. Voces oficiales de la dirección del Polisario denuncian la alineación de Estados Unidos con la posición de Marruecos. En cambio, Bachir Mustapha Sayed aprovecha el revés político infligido a Brahim Ghali y sus partidarios para presentarse como el «salvador del pueblo saharaui». El reciente proyecto de resolución presentado por Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el Sahara Occidental ha generado un gran revuelo en los campamentos de Tinduf. La dirección del Frente Polisario intenta minimizar el impacto político de este movimiento, tras los primeros ecos del documento elaborado por Washington en su calidad de «pen holder» (portapluma). Un representante del movimiento separatista afirmó que «el documento solo refleja la posición estadounidense, y no la de los quince miembros del Consejo de Seguridad». En una declaración a un medio oficial del Polisario, Mohamed Omar acusó a Washington de «apoyar la ocupación marroquí del Sahara Occidental», recordando que Estados Unidos «ha respaldado desde el principio la Marcha Verde (6 de noviembre de 1975, nota del editor) y continúa apoyando al Estado ocupante, tanto en el ámbito diplomático como militar». Omar agregó que esta postura se «fortaleció aún más en 2020», tras el reconocimiento por parte del entonces presidente Donald Trump de la soberanía de Marruecos sobre el Sahara, y fue «reafirmada en abril de este año», luego de las discusiones del 8 de abril en Washington entre Nasser Bourita y su homólogo estadounidense Marco Rubio. «El futuro del pueblo saharaui no está en manos de Estados Unidos, Francia o cualquier otra potencia, sino en las del propio pueblo saharaui, decidido a defender sus derechos legítimos a la autodeterminación y la independencia.» Mohamed Omar Bachir Sayed aprovecha la oportunidad Mohamed Salem Ould Salek, ex «ministro de Asuntos Exteriores» y actual asesor diplomático de Brahim Ghali, transmitió un mensaje similar. En un artículo recibido por Yabiladi, también acusa a Estados Unidos de «confiscar el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y la independencia». No obstante, detrás de estos discursos que oscilan entre la preocupación y la calma, la filtración del proyecto de resolución ha sido aprovechada por el principal rival de Brahim Ghali. Bachir Mustapha Sayed ha utilizado la ocasión para posicionarse como el «salvador del pueblo saharaui». Anoche presentó una nueva «hoja de ruta» que retoma las antiguas reivindicaciones del Polisario, tales como: el reconocimiento de la «república saharaui»; el mantenimiento del mandato de la MINURSO «hasta la organización de un referéndum de autodeterminación»; la intensificación de las «protestas populares en las ciudades ocupadas»; la «continuación de la guerra»; y el «rechazo de cualquier negociación basada en las propuestas del enemigo». En este programa, Bachir Mustapha Sayed también ha buscado tranquilizar a Argelia, que se muestra desconfiada hacia él, denunciando las voces, incluso dentro de los campamentos de Tinduf, que «critican las relaciones argelino-saharauis». De hecho, en las redes sociales, cada vez más habitantes de los campamentos expresan su enojo ante lo que perciben como «el abandono del pueblo saharaui por parte de Argelia». Es importante recordar que Bachir Mustapha Sayed, hermano del fundador del Polisario, había atravesado un largo período de marginación tras proponer, a principios de los años 2000, y sin consultar a las autoridades argelinas, conceder a Estados Unidos una base militar en el Sahara a cambio del reconocimiento por parte de Washington de la «república saharaui», una vez proclamada oficialmente la independencia.